sábado, 25 de agosto de 2012

AGUA Y LUZ

     La luz de final del verano tiene una claridad y un brillo especiales.
 Es de un naranja más cenizo que la de pleno estío. 
 Y cuando hay tormenta... es un espectáculo.
 Hasta las baldosas de la terraza dejan de parecerme horribles durante un rato...
     Los limacos salen a montones con la humedad, y a mí me da un repelús terrible pensar que los voy decapitando involuntariamente con las ruedas de la bici... El otro día éste tuvo suerte porque iba paseando, y a pesar de que son feos con ganas estos bichos..., le pedí que posara para unas fotos... ehhhjejeje... 
¡¡¡FELIZ SÁBADO!!!

1 comentario:

  1. La luz de finales de agosto y septiembre es muy especial. Un amigo pintor dice que es la mejor luz para pintar. Y creo que es cierto.

    Besos.

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