lunes, 5 de noviembre de 2012

HERMENÉUTICA PURA Y DURA...

     Después de unas vacaciones bloggeras no intencionadas, no es que pueda decir que vuelvo con las pilas recargadas... pero sí con la moral algo encendida...     
     La semana pasada escuché por la radio los datos que daba el INE sobre los presupuestos familiares, los cuales desvelaban una caída en el consumo que nos situaba en niveles del año 2009, que se supone que fue un año malísimo en nuestro país, al menos en lo que a consumo se refiere...
     La verdad es que yo en 2009 no noté ninguna "gran recesión" (como se dice en este artículo)... la mayoría de la gente seguía comprándose casas (incluso segundas viviendas como inversión, en el caso del pueblo en el que vivo), a mí me subió el alquiler a casi setecientos euros mensuales (minipiso tipo tetris de cuarenta metros cuadrados en pueblillo de menos de quince mil habitantes), muchos se iban de vacaciones a hotelazos y destinos exóticos, celebraban bodas cuasi reales y comuniones cuasi bodiles... Pero por lo visto, consumíamos poco... muy poco... poquísimo...
     Y me pregunto yo... ¿a qué nivel de consumo se supone que deberíamos llegar? ¿qué es lo que tenemos que alcanzar?¿tiene fin esto del consumo? Fin en ambos sentidos... si tiene visos de finalizar, si es posible alcanzar una cifra óptima y estupenda, y si tiene alguna finalidad concreta, algún sentido, cuál y para quién... 
     Ya sé... igual me hago demasiadas preguntas... quién me mandará... pudiendo sentarme en el sofá a ver la tele y ya está (ay... vaya... que no tengo tele... mea culpa).
     Está claro que este bajón del consumo tiene mucho todo que ver con la vergonzante subida del IVA, devastadora en algunos sectores e injusta no, INJUSTÍSIMA, en absolutamente todos. Ahora bien... ¿si esta bajada del consumo no se hubiera producido principalmente por la subida del IVA, estaríamos también ante una mala noticia...? Ni que decir tiene que sí... que, naturalmente, a ojos de este sistema vicioso y viciado, que se nutre del consumo y la productividad sin límites, toda bajada del consumo es un dato terriblemente negativo. Y esto lo escuchamos y, sin apenas plantearnos el por qué, lo aceptamos sin más, y repetimos como loros que todo va muy mal porque se consume menos, pero... ¿realmente las cosas nos irían peor si consumiéramos algo menos?
     Yo no soy economista, pero es que los economistas de este capitalismo exacerbado no me merecen ningún respeto, porque me parece que están tan contaminados como el propio sistema, ése que nos asegura que consumir menos es malo, y que si no nos hipotecamos de por vida o vamos frecuentemente al híper a llenar los carros hasta arriba, toda la economía se desplomará y nosotros seremos los primeros perjudicados... 
     Así que venga... a seguir consumiendo e hipotecándose, aun a pesar de la subida del IVA, no sea que el sistema se venga abajo por nuestra culpa, por lo poquito que consumimos y esos economistas tan importantes, profesores en las más prestigiosas universidades, asesores de los gobiernos de las primeras potencias mundiales y cabecillas de los consejos de administración de los grandes bancos, se queden sin sus ganancias millonarias, sus yates y sus mansiones...

     Creo que no hace falta ser muy listo, estudiar economía, o moverse en el mundillo financiero para darse cuenta de que el consumo por el consumo no nos aporta ninguna riqueza, no nos hace mejores, ni más cultos, ni más sanos, ni más felices. El aumento constante del consumo no produce una sociedad mejor, así que no me creo que pase nada malo porque disminuya el consumo, a excepción de que los bolsillos de algunos dejen de llenarse a velocidades de vértigo. 
     Quizá precisamente lo que necesitemos sea disminuir el consumo, disminuir la producción, disminuir la destrucción del planeta y dejar de esquilmar recursos. Quizá lo que necesitemos sea parar y reflexionar sobre qué hemos estado haciendo... en lugar de volver a consumir como locos y clamar con las manos bien juntitas hacia el cielo que esto pase pronto, y que podamos volver cuanto antes a la misma necedad que nos ha traído hasta aquí... 

¡¡¡FELIZ LUNES!!!

2 comentarios:

  1. Vaya temita!!! Por supuesto que el consumo no soluciona nada, pero hay que pensar que si no consumimos, muchos negocios se van a la ruina. En mi ciudad, que no tiene grandes empresas ni fábricas, y que la gente vive del turismo y de los servicios, este año con la no-extra de navidad van a cerrar más negocios aún de los que ya estaban cerrando casi a diario. Si yo no voy a la peluquería, por ejemplo, cosa que hago dos veces al año, pero sigo haciendo, y más gente hace lo mismo, mi peluquería, con diez personas trabajando en ella, se va a pique. Creo que por eso a los de arriba les preocupa tanto el consumo.

    Pero luego, esos mismos preocupados por el consumo, hacen reformas que nos impiden consumir...

    En fin... Besos.

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  2. Sí...es como una pescadilla que se muerde la cola, pero eso es el capitalismo, es dificilísimo luchar contra él o poder actuar de forma medianamente consecuente. Yo misma me doy cuenta de que el tren de vida occidental (a todos los niveles) es insostenible, pero también consumo, contamino, compro en Zara o en los todo a cien...
    Es muy triste que los pequeños y medianos negocios quiebren, pero si a los de arriba les importara tanto como les importan los bancos, harían algo para rescatarles, en lugar de obligarles a subir el precio de sus productos y servicios...
    NO sé, es tan complicado...

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